¿Todavía no sabes si contratar una wedding planner? Descubre porque la necesitas

"El tiempo es a las bodas, lo que las villanas a las princesas disney."

En los tiempos que corren, organizar una boda puede llegar a ser una tarea ardua. A día de hoy todos trabajamos mínimo ocho horas al día, y cuando salimos de trabajar lo último que queremos es encerrarnos en casa a tomar decisiones, buscar proveedores y elegir esto y aquello para " nuestro súper día B."

Ahora nos toca a nosotros los "millenial" casarnos y por supuesto no queremos la boda de nuestros padres, tíos o primos. Buscamos esas sensaciones, esas experiencias que antiguamente no eran ni como mínimo alcanzables. Pero claro ¿Cómo organizar esto vosotros solos sin ayuda de nadie?

Para eso hemos aparecido los wedding planner, para poderos ayudar a resolver todos estos problemas. Lo único que tenéis que hacer es volcar todas vuestras ideas y gustos por locos que sean en una conversación, vamos lo que formalmente se llamaría, reunión. Es en ese mismo instante en el que por fin sin darte cuenta has hecho realidad lo que queréis que sea vuestra boda. Y ya solo nos quedará concretar la fecha de la boda [nuestro día de B].

De allí nos iríamos reuniendo cada x semanas para poder ver las actualizaciones y estaríamos en constante comunicación vía correos electrónico e incluso vía llamadas o Whatsapp.

Será ese vinculo constante en el que mientras tú, puedes dedicarte a tus problemas diarios, sin necesidad de tener que poner otro trabajo más al adicional.

Eso sí, habrá ciertos momentos en los que será necesario que te tomes unos minutos para decidir detenidamente las propuestas que se os planteen. Nosotros somos los que por decirlo de alguna manera, os libramos del trabajo sucio [ese que si no sabemos lo que hacemos puede demorar las búsquedas en días interminables de sufrimiento y alguna pelea con tú futuro esposo o esposa].

Pues bien, una vez se han llegado a los acuerdos necesarios entre los proveedores, ya sean:

· catering

· fotografía

· floristería

· diseñador de invitaciones

· alquiler de materiales

· etc

Habremos llegado casi [ y digo casi ] a la hora de la verdad. Faltaran pocos flecos que cortar para que nuestro día B.

Y diréis ¿Y ya está? Pues no queridxs, aquí no acaban nuestras funciones. Es justo en los días previos, donde los wedding planner, nos metemos de lleno en el desempeño de vuestra boda, ya que es el momento de ir al sitio escogido y dejarlo completamente perfecto para cuando vosotros lleguéis.

Eso quiere decir que, mientras nosotros estamos colocando flores, mesas, sillas, vasos, platos, chucherías, mantelerías,... Hablando con los del catering ultimando detalles,llamando a fotógrafos y videogfrafos recordandoles la cita de mañana [vuestro día b]. Vosotros estaréis en la última sesión de belleza, quizás un masaje relajante podría ser el caso, yendo a la peluquería a retocar esa barba para mañana, o simplemente cenando juntos antes de dormir como novios por última vez.

Llega el día de vuestra boda y... ¿Dónde estamos nosotros? pues divididos en mil partes. Estamos con vosotras las novias para daros todo el ánimos, para ayudaros a bajar del coche elegido para entrar a la ceremonia, para extenderos la cola del vestido si hace falta. Con el novio dentro de la sala de ceremonias o en la iglesia ayudando a que la espera no sea tan difícil. Siempre llevaremos un kit anti problemas [nunca se sabe si en el último momento se puede caer un botón de la chaqueta o esos maravillosos tacones nos empiezan a hacer las dichosas rozaduras] en la boda para que nada malo, se nos escape minutos antes de vuestro gran momento.

Es a partir de entonces cuando damos el pistoletazo de salida y nos volvemos invisibles para todo el mundo, para hacer que todo funcione y todos incluidos vosotros disfrutéis de la fiesta.

Así que... después de todo ¿Sigues creyendo que no necesitas una Wedding planner?

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